Felices Fiestas (Español and English)

No obstante, no me olvido de vosotr@s, y de la enriquecedora miel que me habéis compartido. Es un gran obsequio que me llevo conmigo, y os doy las gracias.

Para corresponder, os quiero compartir un ejercicio que un gran amigo mío me enseñó, y que pongo en práctica desde entonces cada año para estas fechas.

• Evalúo a grandes rasgos los logros y decepciones que he tenido durante el año, y los comparo con los planes que tenía al inicio del año.

• Analizo las causas tanto de los éxitos así como de los fracasos.

• Me trazo un nuevo plan para el año siguiente, teniendo en cuenta lo que he aprendido de ese análisis.

Por supuesto, si bien me marco unas metas en cuanto a resultados y fechas, dichas metas son relativamente fáciles de conseguir, si me ciño al plan concebido.

No se trata de estresarse. Se trata de dirigir mis pasos hacia los objetivos que yo elijo, no hacia los objetivos que los golpes de la vida me puedan tratar de llevar. Así, cada vez que tengo que tomar una decisión, pequeña o grande, tengo unas “líneas generales” por las que guiarme, pues son las decisiones cotidianas las que nos llevan por un sendero u otro.

Por encima de todo, la mayor parte de las veces no se trata de cambiar todo en nuestra vida, sino de la manera en que andamos por ella.

Cuando intentamos ser mejor de lo que somos, nuestro entorno mejora también.

Somos libres para elegir y tomar decisiones, aunque dichas decisiones sólo las entendamos nosotros, sabiendo lo que queremos y lo que no, preguntándonos cómo queremos que vaya nuestra vida. El secreto consiste en no tener miedo a equivocarse, y que es necesario ser humilde para aprender.

Este ejercicio que os propongo nos ha de servir para congratularnos por nuestros logros, y si la cosa no va como esperábamos, para analizar las causas y volver a la carga con más empeño.

El mundo pertenece a las personas que son lo suficientemente valientes para perseguir sus sueños.

Dear Bees, I am going to be some days “offline”, or at least, much less active, enjoying with my family and friends these days.

Nevertheless, I am not forgetting about you, and about the enriching honey you have shared with me. It has been a great present I am taking with me, and I thank you for it.

To correspond to this present, I would like to share with you an exercise a great friend of mine taught me, which I use to make every year by these days.

• I evaluate the big picture of successes and deceptions I had along the year, and I compare it with the plans I had at starting of the year.

• I analyse the causes from the successes as well as the ones of the deceptions.

• I make a new plan for the next years, considering what I have learned from the previous year

Of course, even if I mark some goals on results and dates, these goals use to be relatively easy to reach, if I stick to the plan

It is not about stressing me. It is about managing my steps towards the goals I choose, not towards life would like to drive me. This way, every time I have to take a decision, small or big, I have a “master plan” as a guide, because the day to day decisions are the ones which will lead me to one path or another

Above all, most of the times it is not about changing our entire life, but the way we walk on it.

When we try to be better than we are, our surroundings will be better too.

We are free to choose and take decisions, even if we are the only ones who understand them, knowing what we want and what we don’t, asking ourselves how we want our life to go. The secret resides in not being afraid to be wrong, and that is needed to be humble to learn.

This exercise I am sharing has to be useful to congratulate for our achievements, and if it doesn’t go as we wanted, to point out what went wrong and try again, even with more strength.

World belongs to the ones who have been brave enough to pursue their dreams.